domingo, 19 de octubre de 2014

Las primeras respuestas de Laura.

Al día siguiente, tuve ocasión de comprobar lo acertado de la suposición o intuición de mi compañera.
Estaba esperándola en la puerta de la cafetería para desayunar, cuando apareció la pareja; ya sabéis la madama y su hombre.

Era cierto la mujer tenía una forma de moverse dominante, fue ella la que se dirigió al mostrador para abonar la cuenta. Él en tanto, en la calle, colocaba el equipaje. Me llamó la atención la forma de abrirle la puerta, y el aire casi de oficiante de culto, con que se dirigió a ocupar su puesto tras el volante.
Lo hizo dando la vuelta por la parte trasera del vehículo, con una conducta ritual, protocolizada. Pensé que había sido un chófer, profesional.

Bueno y a mi que me importaba eso, como escritor, me gusta observar a la gente, imaginar su historia, quedarme con alguno de sus rasgos para usarlo en mis escritos.
Pero esta vez, afloraba por momentos dentro de mi una sensación de angustia; supuse que era la diferencia entre imaginar la historia de un desconocido y querer deducir por su conducta su que y como.

También es cierto que mi malestar provenía de que la observación no era mía. Es curioso, yo solo, podría haber imaginado lo mismo que Laura, pero el hecho de que la primera observación no me perteneciese me hacía sentirme acechador y cotilla.
¡Uf! Acechador, esa era la siguiente etapa del aprendizaje de mi neófita. El acecho, es una técnica centaura; en que se usa la sintonía corporal con otro sujeto, con el único objeto de forzar la empatía. Pero nunca la enseñamos sin pasar un periodo de alma pura.

El día invitaba a un paseo. Todo lo que en la jornada anterior había sido viento y lluvia, había dejado paso a un día luminoso de otoño.

El sol brillaba y el viento suave rilaba los charcos formados la tarde anterior.

Para nosotros era el espacio de tiempo destinado a la asohora.
La asohora, es la observación que según los antiguos centauros, sirvió de inspiración a los psicoanalistas. El desarrollo las pruebas de libre asociación debe estar en su origen. Dicen que Carl Jung era gnóstico, probablemente conoció la idea y adaptó la técnica.
Él medía el tiempo entre la emisión de una palabra por el experimentador y la respuesta dada por el sujeto. Según su teoría, una vacilación, un retraso marcaba presencia de un complejo.
Definió complejo sobe la palabra y un sujeto tenía un complejo en navaja o en gallina.
Algo que no tiene otro significado; que la palabra excitadora, evocaba una relación anterior con ella, una situación previa. Y esa situación aun disparaba una emoción latente. El disparo bloqueaba por fracciones de segundo la respuesta verbal. Un indicador claro -para el analista- de proceso... digamos inconsciente.
En sistema, que en los primeros tiempos, tuvo aplicaciones en la investigación judicial, quedó mal herido por la interpretación chusca que algún inepto hizo del complejo, como la situación en que el paciente se cree una gallina... navaja etcétera.
Eso le iba yo diciendo a mi alumna que escuchaba con paciencia y por enésima vez mi exposición.
Ella con su habitual sagacidad contestó:
-El problema consiste en, que para que se produzca la reacción se da por supuesto que el sujeto tiene una moral, un conocimiento previo de la ética, algo que puestos a suponer es mucho suponer.
-Si, el sistema no mide el sentido de la emoción. Por ejemplo “un complejo de gallina” es decir una emoción asociada a esa palabra tanto puede responder, a un reacción positiva “me gusta la gallina en pepitoria” o evocar un acontecimiento en el cual el sujeto reconoce su culpa como ladrón de gallinas.
-La interpretación del analista será siempre subjetiva (desde su propio marco moral) los centauros, que llevan siglos observando y observándose, no tienen ese problema. La consciencia de la dualidad centaura. Usa de esas asociaciones libres para auto-definir sus marcos morales.
-Ya se subrayó Laura, como postulante a miembro permanente del colegio centauro, tengo que afrontar la emotio -mi impulso interno-. Todo mi viaje interior, tiene como objetivo aislar las emociones procedentes de la bestia nuestra parte animal de las producidas por el ánima.

-Exacto como diría Descartes res cogitans res extensa. Aunque en nuestro credo, la res cogitans y dios sean la misma cosa. Creemos que nuestra alma es un chispazo de la naturaleza creadora.
Hoy nuestra etapa consistía en un paseo por el entorno del pueblo. No había una inmersión en el logos, un viaje en la profundidad y la distancia. Los centauros cuidamos mucho el simbolismo y el habla. Hoy (algunos de nosotros se toman la libertad gramatical de escribir hoyes) que en el fondo es tan legitimo e irregular como escribir los mañanas y los ayeres sustantivando el adverbio un pronombre y usando un plural, (licencia poética) en realidad supone una lección clave en nuestro saber. Es el hecho que hay muchos y distintos, hoy, ayer, mañana, por lo menos existe uno para cada persona.
-Yo suelo usar -hisdies- en una alocución construida de la misma manera que el hoy (hoc die) pero no se trata de iniciar un debate lingüístico. Se trato que el aprendiz capte la diferencia existencial que hay entre el hoy suyo y el hoy de los otros.
Pues bien el “hisdies” o nuestros hoyes nos obligaban... Porque el hoy de Laura no es mi hoy, y nuestro hoy común no es el de ella ni el mío. Obligaban a mi compañera a exponer en un breve párrafo su expereincia. Lo hizo así:
-Los pobres filósofos griegos no entendieron nada. Nuestro padre Quirón, el centauro sabio, intento enseñarles la filosofía, pero solo Parménides se aproximó un poco al concepto.
La filosofía es una parte de la metafísica, y no como interpretaron con iniquidad los ignorantes posteriores. Sócrates Platón y Aristóteles hacen a la metafísica parte de la filosofía. En vez de ceñirse a el enunciado de Demócrito -Lo que es es, pero es en cuanto se piensa lo que es- por tanto el ser es un juego de la psique. Les llevó a enunciar aberraciones como las creencias que pueblan su mitología.
Valga como ejemplo lo siguiente:
Ellos pensaron un río el Leteo, que producía amnesia a aquel que en sus aguas se baña. Equivale a un agua capaz de disolver la memoria.
También tenían otro río de fuente próxima al Lete o Leteo el Mnemósine que hacía o contrario volviendo la memoria y dando al hombre como consecuencia la omnisciencia.

Y no es cierto, la sagacidad de aquellos pensadores no se percató que los recuerdos solo se disuelven en el tiempo. La corriente de acontecimientos que los arrastra los erosiona y los confunde son como arenas en la riba.
- ¿Pero dime? Donde he de buscar el baño en el río Mnemósine que me de la
- ¡Ah es eso? Ese río es tu fluir, debes tener la perspicacia para comprender lo que antes te indicaba si tu ayer y el mio no son el mismo tampoco tu mañana ni tu hoy tienen que serlo pero como ser humano tienen mucho en común.
 

Reloj de sol de Ascaso Sobrarbe

Huye de las filosofías de las políticas que parecen relojes de sol señala sombras marcan pero ninguna dan. Dije aprovechando que había uno de ellos en la fachada de un viejo edificio y que al mismo tiempo la campana de la iglesia desgranaba lentamente las diez.

martes, 14 de octubre de 2014

En la Montaña II


No creí que nos habíamos alejado tanto del pueblo y del hotel llegamos pasadas la cuatro y media de la tarde. Tampoco el mal tiempo nos hizo acelerar el paso.
Cierto que la temperatura habría descendido su media docena de grados. Cierto que en algunos sitios, los pequeños cauces de agua, mostraban su condición de torrenteras.
Hubo un momento, en que el agua, que ya desbordaba los cauces y había cubierto un paso; más gallipuente, que pasarela. Nos creó alguna dificultad, lo pasé de una zancada no sin mojarme los bajos del pantalón y ofrecí mi mano a Laura para tirando de ella ayudarla a saltar.
Como os contaría yo, ya se sabe que las mujeres suelen exagerar las dificultades que tiene para ellas un obstáculo en el camino, a pesar de saberse muy capaces de superarlo. Cuando al final tiré de ella hacia mi se dejo llevar, tan bien que terminó en mis brazos. Fue un juego animal de ampárame te amparo. Algo en que deben entrar en juego las hormonas y vaya usted a saber que... Lo cierto es que volví a tener esa sensación de gusto inexplicable y que no tiene nada que ver con el sexo... o tal vez si el sexo comience en ello.
La consecuencia es; que hicimos el resto del camino juntos, sin separar los cuerpos y con las manos enlazadas por debajo de los impermeables, con la cesta de las setas tapando nuestras cabezas y saltando charcos como niños. Si me ven los que me creen un hombre serio...

Llegamos al albergue aun en plena resaca del nuestra inmersión en el logos. Sones lejanos de música y una sensación general de libre gozo. A mi, en mi experiencia individual, la salida de ese estado es un tiovivo de sensaciones reforzadas. El rumor de la lluvia. Nuestros pasos en los charcos. Los colores limpios de las plantas. El olor de la chimenea de la casa, olor a leña y cocina olor a hogar olor a casa.
La tarde transcurrió placida, en una serie de conversaciones superpuestas, un ir y venir de palabras como en una marea. Hay veces que las olas del lenguaje se asemejan pero lo probable es que nuestro cerebro ya esté en otro sitio en otro tema.

Sabes. Ayer, en la calle, un bendito de Dios, un beneit como se dice y usa en Cataluña me ofrecía un tríptico con explicaciones sobre La Biblia.
Como ya me conozco el percal lo rechacé firmemente. El me argumentó ¡qué era gratis!
¿Desde cuando una ideología es gratis?
Una idea en el sentido de ideario es algo que mueve a obrar, que compromete, por eso no puede ser gratuita.
Tal vez su cortedad, su falta de comprensión de lo que yo soy, le hizo pensar y hasta orar por mi y por mi alma.
-Todas las religiones usan benditos, para comunicar su mensaje. Dijo Laura mientras sus ojos indicaban que estaba aun lejos del hotel y de la hora.
-¿Quieres decir? Que para hacer llegar las ideas todos todos usan borderline. -Uf yo no he usado ese término; si creo que aun no se han puesto de acuerdo los especialistas para definir esa enfermedad.
-Jo hablar contigo Laura es hacerlo con un manual de diagnóstico.
Eso, acercó a mi amiga a la realidad hablada, y de rebote a la realidad sensorial.
-Soy una educadora y la precisión de lo que se comunica es condición necesaria en mi oficio.
Íntimamente contento por su reacción argumenté:
Yo no me refería a una inestabilidad de carácter o de personalidad lo que quería expresar es lo lábil que resulta el razonamiento en esos señores que nos vienen a hacer propaganda que no publicidad de determinados supuestos.
-¡Que diferencia hay entre publicidad y propaganda?
-La publicidad nos vende o al menos lo pretende vender cosas objetos productos. La propaganda pretende vendernos ideas conductas y a la larga una ética.
-¡Ah vale! Así si lo que quieres decir es que el vendedor de ideas debe estar enamorado de ellas y para que esto suceda no debe plantearse su contenido y consecuencias.
-¡Si eso es! El propagandista, no debe dudar de la excelencia de su propuesta.
La conversación languideció unos momentos. Yo ya me daba cuenta que ella recuperaba su lógica la contundente lógica de Laura, por eso esperé.
- Sabes añadió unos minutos más tarde, deberías crear el partido de los hombres bermejos.
- ¿Porque bermejos!
¿No era ese el color del pelo de Judas?
- ¡Ah pelirrojo! Te refieres al color que se les atribuye a los traidores.
- ¡¡Exacto!! Si fuera cierto; Bruto por ejemplo, le hubiera parecido pelirrojo a Cesar.
- ¿Pero dime? A que viene eso del partido de los hombres bermejos.
- Bueno si tu planteabas hace un momento que la venta de la una conducta o una ética ¿cómo lo has llamado?
-Propaganda las ideas se difunden con propaganda. -Dije con una sonrisa y un deseo ardiente de saber que relación tenían los borderline con los pelirrojos-.
Pues eso que para propagar una idea en beneficio propio solo se puede contar con ingenuos borderline o bermejos.
- ¡Ah! Claro dije intentando dar apariencia de estar convencido. - Comprendía que Laura se hallaba en esa fase de vuelta de la meditación profunda en que las conexiones lógicas están inconexas, un periodo que se algunos llaman creatividad.
Mucho mas tarde en el comedor del hotel Laura me hizo una seña, con los ojos me indicaba que prestara atención a una pareja mira mira parecían decir.
-Seguí la linea de su mirada y vi a una pareja ella era una mujer mayor que aun lleva con gala los pasados esplendores. El un hombre tal vez algo mas joven. Vamos un hombre a juego.
-Los has visto, dijo, si una pareja dos personas mayores que llegaron al hotel poco después que nosotros.
- No no me había fijado mucho en ellos.
- Ayer estaban viendo la tele en el salón que hay junto a la cafetería. ¿No te diste cuenta?
-Si aunque ya sabes que no me fijo mucho en la gente.
-Mírala con detalle, su ropa sus collares anillos y pulseras. A ver que te parece.
Por suerte (los encargos de Laura se deben cumplir siempre) la pareja pasó por nuestro lado lo suficientemente cerca como para poder “hacer la foto”.
- Si, es cierto creo que lleva siete collares cinco pulseras en la muñeca izquierda dos en la derecha tres anillos y dos alianzas. El pelo es teñido, debe estar cerca de los setenta con idea de aparentar cincuenta y varios. Usa una prótesis dental inferior sujeta a los incisivos. Eso es lo que me da una pista sobre su edad.
Laura se tapó la boca con la servilleta para disimular la carcajada.
- Bueno menos mal que no te fijas si te llegas a fijar me dices el color del tanga.
-¿Ah eso tambieén?
-¿Ahora dime que ves en el?
-Es un hombre musculado, mayor, pero más joven que ella, y viste no se con anillos y pulseras debe ser un signo de casta.
-Ya veo, que te despierta menos interés que ella.
-Oye que porque me has pedido que mirara que si no -invisible-.
-Ya ya...
-Sabes de sobra que me encantan las nalgas de chica pero te juro que tu amiga esta fuera de mi espectro de interés.
- Vale vale te cuento. Llevan los dos ropa de marca, el usa Azzaro y ella creo que Paloma Picasso. El también usa pulseras y anillos. Se nota que viste al gusto de ella o mejor dicho que es ella la que lo viste. Probablemente es una madam o madama que se debe decir en español. El es su mantenido.
Cielos lo que hace la sutileza centaura en un cerebro de mujer...
-¡Y como sabes eso?
- Fácil mira como se mueven como lo acaricia ella, es su mascota su perro.
Uf otra como esta y dimito de tutor en el gran consejo centauro.





domingo, 12 de octubre de 2014

En la Montaña


Laura estuvo perdida por el bosque casi toda la mañana.
Yo, que ya conozco de otras veces, esa sensación de unirte con el logos por medio de la naturaleza, la había acompañado un trecho en el inicio de la contemplación de la realidad.
Si recordáis, le hice una reflexión sobre una parte común del genoma de los seres vivos. Aquel que nos permite tratar la metabolización de los azúcares. Algo que compartimos al parecer con los árboles y los animales.
Otras veces he usado para la meditación, la imagen del esqueleto de un mamífero. Algo tan extraño a mi como el murciélago, observando la correspondencia de su estructura ósea con la de un humano.

Relajado y dejando fluir la mente, desde la idea al interior, se alcanza un estado de percepción especial al que suelo definir como el yo en el todo.

Otras veces, llego imaginando el Big-Bang, algo así como una baile de galaxias  de fuegos de artifício, que se transforma poco a poco en un baile de moléculas y después en la vida. 

Se imaginar un agujero negro, soy absorbido por el para ser lanzado a la salida de un angosto túnel a otro universo. Detrás de un agujero negro hay otro Big-Bang otra explosión primigenia y otro universo. O tal vez solo tal vez una copia de alguna manera simétrica a este que habitamos. Pero simétrica a que, un eje a un plano ¿hay una simetría tridimensional? ¿es una simetría en el tiempo? O no es nada de eso.
En cualquiera de los casos, haya lo que hubiere más allá, mi ritmo cardíaco y probablemente un sosiego en mis ritmos cerebrales.

Y luego, muy luego, regresan como en un flash imágenes asociaciones y estados.

Esta vez me quedé contemplando una rama de enredadera, un extraño tropismo que nunca he conseguido explicarme. Porque hay veces que seguida durante varios días, una planta trepadora parece dar palos de ciego hasta que encuentra donde asirse... pero hay veces que se las ve crecer decididas al único soporte que puede considerarse como tal en varios metros a la redonda.
¿Como ven las plantas? ¿Es alguna carga eléctrica la que les avisa donde se halla su bastón? Intento imaginarme hoja y sentir como la luz activa mis procesos, sentir como ese es el secreto, sentirme planta animal o sujeto. Sentirme mi en otro humano, entender su que y su misterio.
Pocas veces puedo condenar a aquel que vivo desde dentro adentrando mi yo en su seno. Pero me temo que es mucho lo que expongo aquí. Lo dejo.

Ya estaba el sol en lo alto del cielo, cuando un sonido de piedras que rodaban por la ladera me hizo mirar. Laura bajaba con un trotecillo irregular venía o así me lo pareció con un aura un halo luminoso en torno a su cara.
-¿Qué cuantas setas has encontrado?
Miré mi cesta vacía y compungido me atreví a decir:
-Me he dejado la navaja en el hotel.
-Vaya por Dios como no sería que salieses de casa completo.
-Oye que completo estoy...
-Si si completísimo dijo ella riendo.
-Lo cierto es que no he mirado nada. Me he entretenido pensando ¿Y tu que tal?
- Bien dijo con una sonrisa, ¿recuerdas lo último qué me dijiste?
-¿Lo de compartir el genoma?
- No aquello de que la vida a veces castiga dando y premia quitando.
-Si
-Ha sido mi principio de la meditación. Me he dado cuenta de lo que suponen nuestros afanes y deseos. El desear el ambicionar es un motor para nosotros, nos empuja nos enciende... pero
- ¿Pero?
- Pero de nada vale la fuerza, la ilusión y el deseo si no sabes para que quieres lo que buscas. Creo que la ambición extrema es esa que nos lleva a tener a querer las cosas como objetos.
- Supongo que es una forma de ver, de justificar, en alguna religión la clave sería el no querer el no poseer. -Dije- haciendo una referencia clara al budismo.
- No no se trata de no poseer; se trata de tener lo necesario y aquello que de alguna manera te hará mejor. Afirmó Laura con cierta vehemencia.
- ¿Mejor en cuanto qué? mejor en ti; mejor para los tuyos, mejor para los hombres en general.
- Ya, no se aspiro a ser mejor para mi, siendo mejor para los otros.
- Huy huy ese mejor para los otros me suena mal. Mejor ingeniero que resuelva una ecuación de uso de la energía. Mejor médico que arranque de las garras de la muerte... (pero Laura vio la trampa que le tendía, por otra parte solo era la vieja trampa del capital).
- ¡Hey muchachito! Nada de engañifas no hay una redención personal por el trabajo tampoco la hay por la inteligencia. Teresa de Calcuta hubiese sido lo mismo con todos los grados de medicina del mundo. El Dr. Albert Schweitzer se planteaba la filosofía de la cultura y la ética
“soy ser vivo y deseo vivir, en medio de seres vivos que desean vivir” por cierto sabes que Schweizer era tío abuelo materno de Jean-Paul Sartre.
-Tuve que confesar que no tenía ni la menor idea del dato. Que me sorprendía pero sobre todo me maravillaba la relación que Laura pudiese ver en ello. Supongo que notó mi cara de perplejidad y añadió:
- Bueno existen sagas sabes, los pensamientos y la ética del hombre responden a un crecimiento en una cultura pero una cultura... una cultura también es como una tierra. No todas las semillas florecen por igual cada una necesita su tierra y su abono.
Después de esto los dos nos quedamos pensativos mucho tiempo. El día comenzó a estropearse.
El sol comenzó por ponerse un pasamontañas de vellón albino, y un viento frio arrastró la cellisca de las cumbres; un cambio en el ambiente de los que la montaña, como niña mal criada, nos regala a menudo.
Sacamos los impermeables y a pesar de la invitación que el tiempo nos hacía para volver veloces al refugio; seguimos allí, a la intemperie los cuerpos juntos, respirando a la par, para volver al mundo con paso cernido. Soportando el suelo escurridizo en que el cernidillo había transformado el camino. Un trueno, el azul de una centella usar la cesta de los setas como sombrero y correr como niños a buscar al abrigo de la llar, del fuego.

viernes, 10 de octubre de 2014

Huevos de Rey


 











Me gusta cocinar no lo niego. Eso me lleva a comprar. Comprar es una función mental que puede llegar a ser creativa. Lo es cuando imaginas sobre la marcha un menú en función de la oferta el número de comensales y el presupuesto.
Tal vez buscando esa fruición, me he acostumbrado a leer con detalle las ofertas. Y tengo que reconocer que las gentes del Marketing Alimentario me hacen pasar ratos divertidos. No se si he comentado la sorpresa que me produjo encontrar jamón ibérico cocido. Aunque para perder el habla fue el día que me enfrenté a un solomillo de pavo o pollo ¿? Cómo dice si ¡Solomillo de pavo! Juro y perjuro que he hecho varios despieces mentales de un ave y aun no se donde se halla el solomillo.
Pero hoy también ha sido un día glorioso. Primero me han ofrecido una judías verdes del país. Luego me he topado con un sobre de jamón ibérico ( es alarmante el numero de estafas que se producen a diario con ese producto) Nuestro mercado está inundado de sobres que debe producir una o dos cárnicas en toda España. Y digo estafa porque el sobre con pinta de artesano no lleva ninguna identificación, ni registro sanitario ni la madre que lo trujo.
Pero a parte de ese acto de fe en el contenido ninguno contiene el peso en gramos que se le supone. Bueno que si la inspección de mercados se da una vuelta por los mercados y tiendas barcelonesas se puede llevar por incorrectos mas sobres -de cerdo- que los de Barcenas.
Hoy creo que ha sido conmovedor, El sobre de jamón queme han ofrecido en la frutería decía: Del Pages a su mesa, jamón ibérico...
Hombre pues mire usted del payés jamón ibérico...
Pero lo mejor, ha sido al salir junto al jamón había un surtido de preparados para arroz fiedua y pásmense. Había un envase que contenía fideuá con ou de reig, y mas abajo figuraba en traducción literal fideuá con huevo de rey.
Hombre monárquicos no, paro tampoco es eso.
Fideuá con amanita caesarea o con oronjas que es el nombre más apropiado en micología.

martes, 7 de octubre de 2014

La oración

Cuando entré en casa, un aroma de café me avisó de la presencia de Laura. Estaba sentada a la mesa de la cocina leyendo, al parecer muy interesada, el articulo de Alan Sokal «Transgressing the boundaries: Toward a transformative hermeneutics of quantum gravity» («Transgredir los límites: Hacia una hermenéutica transformadora de la gravedad cuántica»).

Sokal, profesor de física en la Universidad de Nueva York, envió el artículo a la revista Social Text de la Universidad de Duke -si no recuerdo mal- y fue publicado integro.

Como cualquier persona con dos dedos de frente puede suponer, el artículo es una serie de despropósitos consecuencia de la aplicación de la física quántica a las ciencias sociales. Y una mordaz crítica, a muchos pensadores actuales que siendo ignaros en ciencia visten su sociología de oropeles fantásticos.

Laura levanto los ojos, me miró y dijo:
Mira este es uno de los escándalos mas notorios en los que se ha visto envuelto el oligopolio de la sociología en todos los años de su historia.
-Si estoy de acuerdo en eso, la posterior publicación de Imposturas Intelectuales (Sokal y Bricmont 1997) fue uno de los golpes mas serios dado a la intelectualidad francesa (en su mayor parte) en realidad creo que no dejaron a uno sano; Lacan, Kristeva, Baudrillard y Deleuze Derrida...

- Lo que me sorprende, es que estando traducido al español desde el 99 aun aparecen resabios de esas nomenclaturas en los discursos de Rodríguez Zapatero.
-¿Quieres decir?

-Si frases como el talante muy usada por nuestro ilustre memo, son de esa época. Por otra parte, cuando llegó al poder, hacía fuegos de artificio con algo tan estúpido como la Alianza de las Civilizaciones; propuesta con toda la fatuidad del ignorante, nada menos que en la 59 asamblea de la ONU. Algo que cuando fue expuesto ya estaba en fuera de juego intelectual.
La Alianza de las Civilizaciones si sabrá que quería expresar con semejante peñazo.
-Lo que evidencia la torpeza de los señores asesores de Moncloa. Y además España, como si aquí no hubieran existido en difícil convivencia las tres civilizaciones o culturas. ¡Toledo capital de las tres culturas! Una cosa es que unos intelectuales se entiendan por ejemplo la escuela de traductores de esa ciudad y otra muy distinta que se entiendan los pueblos llanos o el clero integrista de cada creencia.
¡Así nos fue en ello!

-¿No querrás decir que la crisis económica que sufrimos fue un castigo del capital hebreo contra la nación, que quería pactar con el Islam?

- Ja ja ja, no paranoias no, ya tengo suficiente con eso de España nos roba.

- Bueno el chasco ha sido tal, que ya ves Mariano Rajoy no debe tener asesores, en las áreas de sociología y humanidad.
-Pues no le vendría mal, ahora que ya está seguro, que tiene muy difícil por no decir imposible la reelección con mayoría. Que alguien le explicase porque todas sus medidas son impopulares.

-¡Oye porque no nos dejamos de estas cosas y...
Aprecié un brillo felino en su mirada.
-¿Y?
-Y nos vamos de finde a buscar setas, Se que hay feria de boletaires en La Pobla de Lillet y algún sitio mas del pirineo. Dijo mientras dejaba en mi mano una cajita que contenía un canivete de micólogo.
-Supongo que eso me obliga a aceptar dije.
-Me apetece tanto salir de Barcelona, no se solo un par de noches, una pequeña aventura, está tan romántico el bosque en otoño.

- Vale dame media hora, a mi también, me apetece, entré en mi dormitorio y ¡oh sorpresa! Bien penado no tenía porque sorprenderme mi mochila estaba preparada y mis botas de montaña listas al pie de la cama. ¡Como para dar un no por respuesta!
-Veo que ya te has ocupado de mi equipaje ¿y el tuyo?

- Ah no hay problema he usado un poco de tu espacio para poner mi ropa. Añadió Laura con su sonrisa gatuna.
- Oh ahora que recuerdo. Luis María presenta un libro mañana por la tarde y le prometí que asistiría.
- ¿¿Luis que??
-Luis aquel compañero de estudios...

-Mientras Laura ponía una cara de pocos amigos que hubiera asustado a un ogro dije consultando mi agenda:
- ¡Que cabeza tengo la presentación es la semana que viene! De hoy en ocho días.

- Tu cabeza es lo que te voy a romper un día de estos, no me creo ni por casualidad que hayas confundido la fecha, lo que quieres es reírte de mi.

Aproveché el momento en que calmaba su enojo para tomar la mochila las botas y salir corriendo de la habitación, pasando a su lado le di una cariñosa palmada en las nalgas al tiempo que decía:
- El último que llegue al coche paga los cafés en la gasolinera.
El viaje fue lento y divertido lento porque nos asaltó la avenida de gentes que a esas horas volvían del centro a sus casas de la periferia. Nunca he entendido ese juego que por ganar un poco de calidad de vida nos condena a pasar en el coche o en el tren varias horas a la semana. Pasamos la noche en uno de esos hoteles con encanto, que tienen la costumbre de imitar casas rurales. Fue una cena ligera (ligera para lo que sugería el menú de la casa) luego ya anochecido dimos un breve paseo por los entornos del pueblo. Me encantan estos sitios cercanos a ls pistas de esquí cuando la temporada no ha comenzado aun. Mejor dicho entre las dos temporadas el otoño temprano y la primavera tardía. Yo sabía y Laura también que nuestro viaje tenía una motivación oculta. Para un centauro, la naturaleza es un templo, y un templo es el sitio donde se va a orar o como dice Laura invocar -del latín invocáre, que también significa acogerse a una ley, costumbre o razón-. En definitiva a buscar la razón o costumbre que nos mueve desde lo más profundo de nuestra esencia.
Creo que fue a la vuelta que Laura reclinó su cabeza sobre mi hombro, me gusta sentirla así, próxima y simple. Me parece como si tod la noche hubiese permanecido así.
A la mañana, después de desayunar, iniciamos una ascensión por una vereda en la falda de una montaña próxima. Vimos los árboles caducos, que comenzaban a entregar a la tierra sus hojas amarillentas, mientras un hilillo de agua que la niebla matutina había dejado sobre el follaje corría corteza abajo mojando y vivificando los musgos.
Tomada de: https://campusuniversidaddenavarra.wordpress.com/2012/11/

Era el momento perfecto para hacer el acto de oración para invocar la vida con la que compartimos genes.
Orar, que no pedir; porque la vida, las mas de las veces castiga dando y premia quitando.

-¿Sabías que compartimos con robles y encinas el trozo de gen que contiene las reglas para aprovechar los azúcares?
- ¡Azúcar esa molécula que la vida emplea para almacenar energía!
- Si, glucosa sacarosa lactosa variantes bioquímicas para una misma función vital. La energía. Dejé que Laura se centrase en la contemplación de la vida como una serie de cadenas de infinitas interacciones. Mientras por mi parte buscaba en mi mente la hermandad con lo vivo.