He
presentado un relato en Easypromos Premium en Facebook.
está aquí
Para
aquellos lectores que no tienen cuenta en Facebook pego aquí la
historia.
Aunque
esta es la versión larga. La del concurso es esencialmente la misma
pero limitada a 300 caracteres.
Salió
de Alcalá, al pasitrote de rucio, que a poco se mudó, en el lento
ir conque la bestia, solía pasear al reo hasta el tormento. Jumento
de verdugo que paseó por las calles ladrones (en referencia al castigo de montar al reo en un borrico y pasearlo por el pueblo con las espaldas desnudas mientras el verdugo o uno de sus ayudantes le medían la espalda a latigazos) y hasta obispas. (penados del Santo Oficio que eran paseados con sambenito y capirote)
Uno
estudiante que hacía el camino hacia La Universidad, que tenía
pinta de ser uno de aquellos fámulos; que acompañaban al señorito
como servidores, a cambio de cama mesa y estudios. Y al que no le
deberían ser desconocidas las andaduras del borrico le dijo:
-Buen
asno usa, el licenciado.
Martín
con ironía alegó. Estudié los dos derechos en la universidad. La
mejor lección que aprendí dice:
Proceda
el juez, a paso lento de jumento, asegurando las pruebas contra el
reo.
-Eso,
contestó el estudiante, proceda con calma señoría y dele al verdugo alazán, para que los
azotes duren menos. Que con justicia lenta y castigo corto, mejorarán
los asuntos de este reino.
1 comentario:
Hay una obra de Quevedo. Carta del Caballero de la Tenaza, que es un estudio léxico de habla y los usos del hampa. En ella habla de la esquinancia de esparto, la horca, y otras y otros giros del habla popular y se supone que de el maleante. De allí están tomados los paseos en burro y las obispas. Sea puesun pequeño homenaje a Francisco Gómez de Quevedo Villegas. Gloria del ingenio y las letras hispanas.
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