jueves, 14 de julio de 2011
miércoles, 13 de julio de 2011
Una pareja insólita Ana Ozores y Wody Allen II
[caption id="attachment_825" align="alignleft" width="225" caption="Woody Allen"][/caption]
En el post anterior narraba; que en la noche del solsticio de verano, salí de mi hotel en Oviedo. Dispuesto a vivir algo fantástico, llegué poco antes de las 12, a la plaza de la Catedral. Pude ver como la estatua de La Regenta, situada frente al templo, tomaba una coloración fluorescente que se transformó en una guapa mujer. La vi tomar cuerpo, y encaminarse hacia donde está emplazada la efigie, con que la ciudad, rinde homenaje a Woody Allen. Una vez junto a el, otra emanación tomo la forma del actor y director de cine. Empezando con la mujer el dialogo que transcribía y ahora continúo.
Ana:
¿Sabes? Me gustas mucho en sueños de seductor. Yo se bastante de seductores, no en vano fui cortejada y deseada por los mejores Don Juanes de mi tiempo.
Me gusta esa alucinación permanente de Bogart, ese llamar al mentor. Al final me hace pensar, que todos los conquistadores son unos actores que necesitan traspunte ¡Que falta de seguridad!
¿Tanto os importa una mujer, qué solo con estar cerca, perdéis seguridad y compostura?
La pareja se pone en marcha, hacia la terraza una heladería próxima. Naturalmente esta cerrada pero se sientan. Algo que yo aprovecho para sentarme junto a ellos en una de las sillas, la mas próxima a la pareja, ignoro si me ven, pero si esa así, no parece importarles.
Woody: Bueno yo no se... sabes mi psicoanalista dice...
Ana: Al diablo lo que diga el loquero ese, hace falta estar muy estropeado para tragarse esas paparruchas.
W. Ya veo que has lo has visitado, ¿Te habló de tu complejo de pérdida de pene?
Ana. Que complejo de pérdida ni que niño muerto, que estupidez es esa de la disolución de mi Edipo o de mi Electra. Yo no padezco de esas cosas, a mi madre no la conocí de otras mujeres que pudo conocer mi padre no tengo ni idea. Mi padre me parecía un ser maravilloso y si me privo de su compañía era por la política. En fin terminó mal ya lo sabes.
W. Pero el conflicto edípico.
Ana. No, no insistas, yo no tengo eso ni lo puedo tener, Freud lo enunció casi 40 años después...
Simplemente en mi tiempo no existía y punto.
W. Pero el Edipo es arquetípico universal...
A. Y dale, parece que olvidas que yo soy un personaje literario no puedo estar compuesto de otras cosas que las que había en la mente de mi padre literario Leopoldo Alas, Clarín.
Por ejemplo; mi madre murió de una fiebre puerperal, así lo dice mi historia pero no refleja, que esa infección era consecuencia de la falta de higiene. Algo que ya había demostrado un médico húngaro. Pero que tardó a ser reconocido. Yo fui huérfana por una negligencia médica.
W. Pero el deseo sexual es universal para todos los humanos y en todas las épocas.
A.¿Acaso eres capaz de imaginarme haciendo un trío con el canónigo y mi marido?
¿O proponiendo un intercambio de pareja a los marqueses de Vegallana?
¿Acaso entra en tu cabeza? La posibilidad de describir una relación lésbica con la del banco.
W. Pero si soy capaz de imaginarme haciéndote el amor.
Creí apreciar un incremento del tamaño del ectoplasma de Allen. También me pareció oir el sonido seco de una bofetada. Pero seguro fue imaginación mía. Los fantasmas no se pegan.
W. Bueno, quieres decir que tu vida fue el fruto de las circunstancias. Deberías haberte casado con el cura...
A. Estás loco eso no podía ser.
W. Eso es una tontería de la Iglesia Católica. Mira anita nadie es mejor garante de la honestidad del rabino que su propia esposa. Por eso se le exige el matrimonio para ejercer en la sinagoga. De la misma manera la mujer del pastor protestante es la garantía de continencia.
Solo los católicos y las palomas os emparejáis de por vida, menos los curas que quedan siempre expuestos a la murmuración y la envida.
A. Y a la tentación dilo ya.
W. Si y a la tentación.
En ese momento me distraje, era cierto lo que los dos... ¿Los dos amantes? No no puedo decir que lo fuesen. Bueno pues eso que era cierto lo que decían. Por una parte Ana afirma la inseguridad que al hombre español le produce la mujer. Por otra parte puede que Allan esté en lo cierto el presbítero a pesar de que su nombre hace referencia a una ordenación tardía. Para evitar la fogosidad de los años mozos. No evita la tentación de la carne. Ni las habladurías de la gente.
Luego vemos un cuadro social en que los liberales lo son solo por comparación con los absolutistas pero en temas como la mujer y el honor son tan calderonianos los unos como los otros.
Antonio Cánovas del Castillo conservador a ultranza, novela La Campana de Huesca donde se plantea una justicia que ya figura en Herodoto. El cortar las flores altas, el decapitar a la nobleza reticente. Sacrificio que hace la derecha para seguir siendo derecha. Liberales lo que se dice liberales habría que buscarlos en los círculos del partido constitucional y entorno de Práxedes Mariano Mateo-Sagasta Liberal hasta en la restauración borbónica. Pero eso es otra historia. ¿Qué hacen ahora nuestros amigos?
Continuará
Darío
martes, 12 de julio de 2011
La "Solución final" al problema económico español.
La economía es como el fútbol. Todos son capaces de dar consejos al entrenador.
La realidad es; que la economía aparte de concitar la mayor cantidad de legos en la materia. Que muestran sin pudor su desconocimiento. Es algo que hay que jugarlo en equipo. Cuando un equipo pierde reiteradamente, suele achacar sus fracasos a las manos negras, los arbitrajes parciales. Hasta la compra de árbitros.
Todos las ligas asistimos a las declaraciones de ese entrenador patético, que termina culpando a la prensa de sus malos resultados.
Hoy Zp el inefable, del que ya no se puede decir mas de lo que se ha escrito. Nos ha vuelto a deleitar con una actuación garrula como todas las suyas.
El inepto el incapaz, ha terminado culpando de la crisis de la deuda española a los países grandes (económicamente grandes) por no ponerse de acuerdo en la resolución del problema griego.
Maravilloso ejercicio de de pelotas fuera. Alguien debería explicar Urbi et Orbe que la economía se fundamenta en la confianza.
Que la confianza es la fe ciega de que por unos recortes de metal o de papel que son el fruto de nuestro trabajo tendremos cubiertas nuestras necesidades.
Que la confianza es la seguridad que tiene el banco de cobrar el dinero que nos adelanta para un bien de consumo; un coche, una vivienda.
Que esa confianza pasa por un escenario futuro que el banco imagina con prudencia.
Pues bien visto esto, lo que nos sucede es que el señor Zp no inspira confianza, ni el ni el 99% de los políticos que nos gobiernan.
Lo que procede es que el señor Zp y el PSOE que han tolerado unos escenarios de cuento de hadas para la banca. Unas fantasías orientales para irrealidad económica de España simplemente dimitan se vayan. Que como el mal entrenador se les expulse de los puestos de dirección.
Tal cual, muerto el perro, se restablece la confianza.
Y como los por llegar si tienen soluciones si tienen ilusión para vendernos, los cambiamos pero lo prudente es usar con ellos la legislación laboral
Me explico: Que el PIB no crece un ERE de políticos.
El gobierno con contrato temporal, el salario minimo interprofesional, y en función de las horas trabajadas. El contrato de prueba, el fijo discontinuo, el contrato de obra.
En fin si en vez de votar contratamos a los políticos el resultado será mejor. [es un suponer] y si entre la mano de obra nativa no hay suficiente los importamos. Eso si con el billete de vuelta a su país en el precio del salario.
Darío
domingo, 10 de julio de 2011
La Regenta (Ana Ozores) Y Woody Allen una pareja insólita
Dicen que hay noches brujas, noches donde todo es posible. En realidad en los solsticios se producen fisura en el espacio tiempo. Así es posible que se encuentren personas que vivieron en siglos distintos. Yo creo, que esas noches de fantasía, donde todo es posible, no solo perviven las memorias de los seres antiguos. También se ven con sus cuerpos los seres imaginarios que solo fueron creación de los poetas. Ficciones de novela, de novela de leyenda de cuento.
Y he aquí que me hallo en Vetusta la noche del equinoccio este año es algo antes de San Juan. La noche meiga.
He salido del Hotel, la cuidad duerme, las avenidas vacías, me he encaminado hacia el casco histórico. Si hay algo mágico inusual o fantástico será allí donde espero verlo.
Estoy cerca de la catedral, he llegado a ella por la calle del águila, calle que no ha debido cambiar su nombre durante siglos ni su pendiente, sudo y mi respiración se entrecorta es el paso que llevo ¿O la emoción de esperar algo insólito?
Por fin he llegado, pasan unos minutos de las doce, hora bruja en una noche bruja, la plaza de Alfonso II el Casto y allí al fondo un bronce el de Ana Ozores “La Regenta” no deja de ser irónico.
Ana la casta en su matrimonio en la plaza de Alfonso el casto también casto en sus nupcias. Pero Ana... bueno no voy a repetir una historia que ya conocéis.
Pero... que es esto un leve fulgor en la estatua ¿O son mis ojos? No, no, hay un extraño brillo. Una especie de ectoplasma se desprende de la estatua y en breves momentos configura el cuerpo de una mujer joven y guapa, maravillosamente guapa ¿Será ella? No no puede ser, viste un pantalón ajustado, una blusa blanca de manga corta, y unas abarcas menorquinas. Su pelo, de un castaño casi rubio cortado a lo garçon deja ver un ovalo de cara casi perfecto donde unos labios rojo cereza hacen el contrapunto de sus ojos negros. Ojos que tienen una mirada curiosa inquisidora, de reto.
Se ha puesto en movimiento y maquinalmente la sigo, el movimiento de sus pasos, el suave contorneo de caderas tienen para mi algo de hipnótico.
La he seguido a su paso hasta San Tirso el Real después tomó Por la calle La Rua hasta San Francisco. Ahora camina delante de mi hacia el Campo de San Francisco esa huerta conventual que hoy es un maravilloso parque urbano.
La sigo, procurando no perder la distancia, ha tomado por la Calle Uría, es difícil perderla de vista, así que la dejo tomar un poco de distancia.
Mientras la sigo, repaso lo que he leído de Uría, en realidad la calle esta dedicada a Don José Francisco de Uría y Riego. Era este un político liberal al que O´Donnell nombró director general de Obras Publicas. Desde su puesto favoreció la construcción de carreteras en Asturias y el ferrocarril Pajares Gijón, siempre se defendió de un supuesto favoritismo hacia su tierra diciendo que la riqueza asturiana favorecía a todo el estado. Como anécdota se puede contar que las cuadrillas de camineros que construían la carretera y el ferrocarril en Pajares, pusieron como condición no comer salmón mas de dos veces por semana. Cosas de la logística y de los tiempos.
Mientras, Ana Ozores, ahora ya no me cabe duda de que es ella su avatar o su memoria ha llegado a la esquina de la Calle Milicias Nacionales. Se ha parado un momento en la esquina como si dudase pero por fin se ha dirgido con paso resuelto hacia el interior... y se para frente a una... otra de las múltiples estatuas que hay en Vetusta. ¿Pero que veo? Es la efigie de Woody Allen. Si Allan Stewart Königsberg, el cineasta músico y probablemente el intelectual mas europeo que ha dado NY.
Parece que le habla intento escuchar... a ver... Allan Allan estas ahí lo se no te hagas el sordo. Eh eh ah ¿Anita eres tu? Perdona algún salvaje me rompió las gafas. Si soy yo Ana Ozores “La Regenta” conoces mi historia desde tu vista a Oviedo en el 2002. Si si Anita ¿Ya has visitado a mi psicoanalista como te recomendé?
Jajajaja. Si fue tal como tu decías pero de eso hablaremos luego, va sal de alli y vamos a tomar un café me gusta estar contigo... tu siempre has estado rodeado de mujeres guapas yo creo que no desmerezco. No no si eres guapa muy guapa... pero me da una pereza. Bueno entonces no te cuento que he visto todas tus pelis... Ah oh ¿Si? Siiii.
Continuará
Darío
jueves, 7 de julio de 2011
Vetusta la ciudad, la monja, la revolución del 1934...
Llegada a Vetusta
Como escribía ayer...Vetusta es el nombre que Leopodo Alas Ovetense nacido en Zamora le otorga a la ciudad donde transcurre su novela La Regenta. Identificar el Oviedo actual con aquella capital de provincia de fines del siglo XIX es difícil. Aunque el casco viejo y monumental conserva las huellas de su historia; muchas veces turbulenta historia, Oviedo es una ciudad moderna, en ella conviven experimentos arquitectónicos como el de Santiago Calatrava junto a trazados del fin del siglo XIX. En esta época fue cuando muchas ciudades españolas rompiendo los esquemas urbanísticos medievales iniciaron un crecimiento y expansión con arreglo a otros cánones estéticos y funcionales. La Calle Uría que en su trazado se llevó por medio el carbayon viejo roble (carbayu) árbol sagrado de los astures que dio segundo gentilicio a los ovetenses.
Oviedo es una ciudad provinciana como dicen en Madrid de todo aquello que no es “el foro” y provincianos son sus habitantes. Pero ser provinciano y capital de autonomía no excluye la educación la elegancia en el vestir y una exquisita corrección de sus habitantes. Oviedo en su arquitectura, en su historia y en sus gentes es una ciudad encantadora como dijo Wody Allen parece un cuento de hadas. Es una ciudad limpia, con miles de magnolios primorosamente podados en sus calles y avenidas. Con un teatro, El Campoamor, sede de la entrega de los premios Príncipe de Asturias. Ciudad universitaria y ciudad museo de escultura. Porque en ella puedes tropezar con versiones en bronce de personajes de su historia real, novelada, folclórica o literaria.
De los muchas esculturas que ornan la urbe yo me quedo con una figura que esta en la plaza del General Ordoñez, llamada Adiós Cordera porque representa los personajes de un cuento de Clarín del mismo titulo.
¡Eran tres, siempre los tres!: Rosa, Pinín y la Cordera.