martes, 8 de diciembre de 2015

Arlekines


Es carnaval, vestido de arlequín salgo a la rúa. Me espera Colombina con labios de carmín
ojeras de antimonio, fidelidad perruna.
Colombina y yo y su recíproco, amantes de comedia. Paseando por la rúa me veo feo reflejado en la luna de la paquetería. Colombina se ve, se ve a su vez en un viejo cristal peluquería. Y miro con detalle la calle, y veo otra vez la luna y su reflejo. A la derecha Ella y yo a la izquierda yo y ella. Gloriosa simetría, pero ni ella es yo ni yo soy ella ni el fulano que a su brazo cuelga, tiene el menor parecido con mi presencia.
Mira le digo al tío del espejo tu no eres yo pero sales con ella, romperé el cristal te retaré a duelo y de un gañivetazo te tiro muerto.
Y entro en el cristal y el mequetrefe toma las de Villadiego. Lo agarro por el frac le tiro el antifaz y su rostro no veo. Nada hay detrás de la careta, y preocupado me quito mi antifaz y puedo comprobar que mi rostro también se ha fugado.
Es carnaval, vestido de arlequín voy por la rúa, pero sin antifaz porque mi cara está al otro lado de la luna.

viernes, 20 de noviembre de 2015

Forcados amadores...


Evocando. Pues si si mal no recuerdo la rubia de Santaló se llamaba Marta, era de ese tipo de mujer que tiene de todo, quiero decir que tenía pechos nalgas boca nariz.... todo en un conjunto de elementos armónicamente distribuidos, una mujer que invitaba a tumbarse en la cama junto a ella y leer.

Alguna vez, imaginé leer El Quijote acostado a su lado, pero nunca conseguía pasar de aquello de “duelos y quebrantos los sábados, lentejas los viernes”... Yo pertenecía la cofradía de Forcados Amadores, dicho en castellano, recortadores, esos mozos que juegan haciendo regates frente al toro, sobre el toro, y con el toro, evitando siempre el revolcón.

O en el mejor de los casos, revolcón sin que te pille el toro. Bien, pues en nuestra cuadrilla, de liberales solíamos valorar a las hembras conforme a un inexistente código consistente en emparejarlas con una obra literaria. Porque claro, no era lo mismo pasar la tarde noche, con una hembra, Guerra y Paz; que con otra Madame Bovary, u otra La Divina Comedia. Era un buen sistema, porque dejaba mucho hueco para la imaginación y por otra parte nos ayudaba a confeccionar un mapa surrealista del ganau en liza.

El artífice de esta nomenclatura era Manolo, al que la cofradía respetaba por su arrojo y buen hacer en los quiebros, aunque como todo cántaro que va mucho a la fuente...
Pues eso que un día llegó y al comentar las incidencias de su lidia dijo solamente Laura Petrarca. En vano le preguntamos si era Laura de Sade, Manolo calló calló y cayó en un mutismo estúpido y a los pocos días dejo de venir. En fin que ni de la rubia ni de Manolo volvimos a saber

domingo, 8 de noviembre de 2015

Jiménez Ruiz Blanca por más señas.

Nos enseña Africa Jiménez Ruiz un paisaje de campo y árboles dormidos en invierno. Pudorosos se cubren con un manto de niebla para no mostrar sus cuerpos esqueletos.
Es Blanca, escritora poeta de esencias buena lectora y destila tanto sus aportaciones que a mi me parece pasan siglos entre ellas.

lunes, 2 de noviembre de 2015

Un libro a la fuga II

Lo ha vuelto a hacer, estaba yo poniéndome los zapatos cuando lo he visto. Escondido entre el calzado de verano. Allí estaba el libro, ha visto que lo veía y ha intentado huir pero he sido rápido y diestro y con una bota de montaña he terminado con su fuga.
Ha quedado abierto innoblemente abierto de hojas y mi bota lo aprisionaba contra la jamba de la puerta el quicial que llaman.
Lo he tomado con mano trémula, la suela de mi bota quedará para siempre impresa en las páginas 180 181 de la obra.
Supongo que ya suponéis que hablo del libro de Fernández Mallo Agustín mor mas señas.
He leído un poco al azar
Era ella, de espaldas, dirigiéndose a la habitación del fondo al tiempo que se bajaba la faja y las bragas …/... el sol rasante …/... y tras atravesar el cristal …/... bañaba el cuerpo …/... para colarse entre el hueco desparramado de la entrepierna. Entonces le cegó una estrella púrpura de cinco puntas hermosísima, magnética parpadeante en la penumbra del ano de aquella mujer. (Agustín Fernández Mallo Ya nadie se llamará como yo ISBN: 978-84-322-25O8-6) [Me acojo al derecho de cita]

He vuelto con el libro entre la manos al anaquel en que lo dejé aprisionado. Me he llenado de estupor el libro seguía allí entre Las Clavículas y el grimorio. Y es que Agustín Fernández es Físico ya se sabe uno de esos seres raros que se inventan mundos matemáticos a la velocidad de la luz y viceversa. Yo tengo ahora como el electrón en dos rendijas dos libros o como el Gato de Schrödinger un animal que está vivo y muerto al mismo tiempo. Un libro preso de otros libros de magia y el mismo libro con la marca de mi bota entre sus hojas.

martes, 22 de septiembre de 2015

Racionalismo y Descartes II


Decía que Rene Descartes dice en su discurso del método.
"Mais aussitôt après je pris garde que, pendant que je voulais ainsi penser que tout était faux,” (Pero poco después me hice cargo de que, mientras que yo deseaba pensar que todo era falso) Era necesario que yo que lo pensaba fuese algo.
Algo que nos llevó al pienso luego existo o pienso luego soy.
Y no es Descartes el primero que enuncia este juicio, Gómez Pereira ya había hecho enunciados similares casi un siglo antes. Gómez habla de los phantasmas como creaciones de la mente humana, y no se está refiriendo a almas en pena, se esta refiriendo a entes no reales creados por la imaginación humana o recreados por la memoria.

Y Descartes se pierde, no es capaz de volver al alma racional aristotélica y de la mano de la educación de los jesuitas cae en un alma platónica, bendita por la religión, y tropieza otra vez en un hombre dual.

Pero no hay duplicidad no has abscisas y ordenadas, no es cogito ergo sum con el cual le conocemos. Ni hay un ego ni hay un yo. Yo soy mi memoria, en cuanto que recuerdo episodios de mi vida, eso me hace recordar las vivencias con los míos, y también con los enemigos.
Porque somos el pensamiento, yo soy así porque así me pienso...
Tu eres tal como te piensas, como te recuerdas...
(Una realidad física, solo nos parece real en un intervalo. Nos lo parece en tanto que la percibimos, por medio de unos sentidos; pero ya sabemos, que esa percepción tiene unos umbrales, que están marcados por una frecuencia como el sonido y la luz, marcados por una intensidad umbral de sensación y por un crecimiento del estímulo, que no es lineal para que percibamos mas luz mas sabor o mas presión el estímulo ha de crecer en progresión geométrica.)

Y si vosotros ya sabéis eso, que el entorno la realidad, es un sensación que llega al cerebro, y si reconocéis conmigo que vuestra memoria en episodios es vuestra vida, aquello que recordáis.
¿Qué os impide reconocer el hecho de que vuestro yo es vuestro pensamiento?
¡Qué vosotros sois vuestros juicios! ¡No hay metafísica! Solo hay lo que parece.
Pero sabéis que no hablo tanto de lo que la mente percibe sino de lo que la mente elabora, tu eres tus juicios, tus opiniones tu eres lo que muestras hacia los demás.
Y eso si puedes cambiarlo. Cambia tu juicio sobre el vecino y habrás cambiado tu. Deja el pensamiento que te invita al recelo, y habrás cambiado tu.

Y cuando todos los tu del mundo inicien el camino de ese cambio, la humanidad también habrá cambiado.
Los psicólogos juegan a estudiar la memoria, hacen test de inteligencia, pero desconocen la esencia de una y otra.
Clasifican las memorias y los aprendizajes algo equivalente a saber como son los circuitos de un ordenador en función de como busca y presenta los datos.
Ninguno tiene el valor de atreverse con los juicios, con las razones últimas de la conducta.