Treinta minutos antes del
comienzo ya estaba yo en la meta preparado, mis Nike Las Ray-Ban, el
móvil en el antebrazo hecho un figurín Decathlon. Este año he
añadido a mi equipo unos auriculares estéreo, que me permiten
seguir las instrucciones de mi personal trainer. Estas son
seleccionadas por un microprocesador que percibe mi ritmo cardíaco y
la oxigenación de mi sangre.
Porque nunca fue dicho
que para batir marcas no fuese legal aplicar la técnica. He hecho
unos primeros 50 metros fabulosos en cabeza de la carrera, entonces
mi sabio asesor me ha dictado por los cascos la orden imperiosa de
tomar un bocata de lomo bacón y queso con su
correspondiente cervecita ya que al parecer mi baja de azúcar en
sangre así lo exigía.
Y es que a mi personal
trainer, lo contraté en McDonals y es lo mejor de lo mejor en su
género.
Por lo demás, la chusma ha seguido corriendo; mas de 70.000 tíos y tías haciendo el ganso y produciendo unos atascos épicos en Barcelona. ¡Porque a ver que sentido tiene que El Corte promocione una prueba de este tipo? ¿Espera tener los clientes más veloces! Es solo publicidad para la casa.
En el fondo es preocupante esta demostración de gregarismo que pasa por ser la mayor de Europa.
Es esa la duda que me asalta, cuando ya corregida mi curva de glucemia, me he puesto a verlos llegar en la meta, veía en sus caras la fatiga sin sentido, la sed horrorosa y la necesidad de tragarse una lata de Coca Cola eficaz reconstituyente que unos voluntarios repartían entre los participantes con la misma velocidad que la firma reparte ERE`S y despidos.
Por lo demás, la chusma ha seguido corriendo; mas de 70.000 tíos y tías haciendo el ganso y produciendo unos atascos épicos en Barcelona. ¡Porque a ver que sentido tiene que El Corte promocione una prueba de este tipo? ¿Espera tener los clientes más veloces! Es solo publicidad para la casa.
En el fondo es preocupante esta demostración de gregarismo que pasa por ser la mayor de Europa.
Es esa la duda que me asalta, cuando ya corregida mi curva de glucemia, me he puesto a verlos llegar en la meta, veía en sus caras la fatiga sin sentido, la sed horrorosa y la necesidad de tragarse una lata de Coca Cola eficaz reconstituyente que unos voluntarios repartían entre los participantes con la misma velocidad que la firma reparte ERE`S y despidos.
Al final, hervía la
plaza de Cataluña en un gentío, en una pluralidad de aromas de
axila y perineo capaz de marear a un sabueso con anosmia. Supongo que
ese es el sentido final y animal del acto social, el animal que suda
unido se siente mas partícipe de la masa. Un gran secreto de la
integración social, los clientes de una marca los son por su
capacidad de compartir su olor corporal. Nada de hipocresías, de
desodorante y jabón, nada de camuflajes a lo Chanel Carolina Herrera
o cosas por el estilo. Lo que mola es un olor acre con cierto regusto
de crianza, me temo que pronto Paco Rabann o cualquiera de ellos nos
puede sorprender con una horterada inspirada en el evento. Ya imagino
el anuncio huela a Barça Campeón el olor de la columna vertebral de
la selección española.
En fin y si lo que me
sucede en esos aromas he respirado los restos de algún anabolizante,
de algún poderoso elixir de los que usan los atletas. Tal vez quizás
sea eso lo que me produce esta coprolalia irrefrenable. Me lo haré
mirar cierto.
El paseo termina, sin
prisa crucé la Catedral, El Gótico, La Merced y hasta el puerto,
paseo por Juan de Borbón hasta el espigón, y vuelta a casa en
auto-bus, colapsado por los que había en la calle los corredores sus
familias y los negros manteros.
Aunque puede que el año que viene Dios mediante me haga charnego, tuso noctílope, antes que sabueso con anosmia que para eso ya están los de siempre, los políticos cuando tienen que enterarse de las necesidades de su pueblo. Vamos que ni las huelen.
Aunque puede que el año que viene Dios mediante me haga charnego, tuso noctílope, antes que sabueso con anosmia que para eso ya están los de siempre, los políticos cuando tienen que enterarse de las necesidades de su pueblo. Vamos que ni las huelen.