sábado, 7 de mayo de 2011

Un guiño a Pura

Impúdica vestal que con tus textos


evocas en latín tan prohibido


de Cátulo y Ovidio los los poemas


que unen como solo lo hace el sexo


el tálamo y la carne en el deseo.


En altar de venus yo te imploro


ardiendo en lúbricos anhelos


Un beso en tus labios entreabiertos.


Darío V.R.


Versión final  Hay veces que un poema nace como una chispa; pero luego es necesario pulir y pulir sus formas, casi como el escultor que poco a poco las formas de la pìedra redondea. De momento esta es la última versión:


Impúdica vestal que con tus versos


de Eros interpretas letanías


evocas en latín lo prohibido


de Cátulo y Ovidio los los poemas.


 Unen como sabe hacer el sexo


el tálamo y la carne en el deseo.


En el altar de venus yo te imploro


ardiendo en lúbricos anhelos


Un beso de tus labios entreabiertos.


Darío

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